EXPERIENCIA EN MISIONES : LA HISTORIA DE CUATRO ALUMNOS QUE GANO EL CONCURSO "ESCUELA, CAMARA, ACCION" Un filme y un pedido: "No permitan a sus hijos abandonar la escuela"

Ernesto Azarkevich MISIONES. CORRESPONSALIA
misiones@clarin.com

Cuatro alumnos del Polimodal del Bachillerato Común de Comandante Andresito, un poblado al norte de Misiones, en el límite con Brasil, ganaron un concurso de cuentos auspiciado por el Ministerio de Educación de la Nación.

Los chicos lograron que su historia se convierta en un corto que dirigirá el cineasta Juan José Campanella.

El cuento "Injuria", que escribieron las alumnas Fernanda Bate, Silvia Victoria Cáceres, Cristian Jonathan Da Silva y Valeria Viviana Brambilla refleja la dura realidad de los pobladores de la zona que se dedican a la cosecha de yerba mate. Sin embargo, también hablan del abuso y la explotación infantil.

Cuando los docentes les avisaron que podían presentarse al concurso "Escuela, cámara, acción", el grupo no dudó y cada uno comenzó a imaginar la trama de un cuento que lograra identificara la idiosincrasia de Comandante Andresito. Silvia, Cristian y Valeria rápidamente se dieron cuenta que la mejor historia la tenía Fernanda y decidieron concentrarse en ese argumento.

"Injuria" tiene como protagonista a Sandra, de 15 años que todos los días queda a cargo del cuidado de sus hermanos, hijos de la misma madre y distintos padres. Hace las tareas del hogar para que su madre pueda ir hasta los yerbales a trabajar.

Según el guión de los chicos, cuando la mujer intenta rehacer su vida con un viudo que tiene un hijo llamado Gustavo, aparece el padre biológico de Sandra que intenta dos veces abusar de ella.

Y no lo logra porque Gustavo logró rescatarla a tiempo. Esta es, en síntesis, la historia que contó este grupo sobre la realidad que más les duele. Para conocer más de Sandra y su familia habrá que esperar el filme de Campanella, creador de "El hijo de la novia".

"El argumento de lo que quisimos contar lo sacamos del día a día, de lo cotidiano. Quisimos reflejar el sufrimiento de los adolescentes de la zona que muchas veces son presionados por sus padres para dejar la escuela y ayudar en la cosecha de yerba mate", dijo Fernanda.

Su grupo de compañeros añadió: "En cierta forma lo que buscamos en concientizar a los padres de lo importante que es que sus hijos no abandonen la escuela porque es la única vía de superación que tenemos".

Fernanda admite: "Es doloroso para mí ver que muchos de mis compañeros de escuela andan hoy arriba de un camión lleno de yerba cuando deberían estar todavía acá, en el Bachillerato".Los ganadores cuentan que su historia —compitieron entre 1.500 de todo el país— casi quedó en el camino. "Nos enteramos que otro curso estaba trabajando fuerte en un cuento porque la profesora de Literatura lo tomaba como un trabajo práctico. Eso nos tiró abajo y dejamos trunco el proyecto hasta que nuestros docentes nos incentivaron a terminarlo", explican casi a coro."Los últimos días casi no dormíamos porque de las diez hojas de carpeta que tenía el cuento había que reducirlo a tres carillas tamaño oficio, como decía en el reglamento. En eso nos ayudaron el profesor de Lengua y Geografía, Ramón Martínez, Mónica Otto de Comunicación Artística y Lenguaje, y Alice Carapuni, directora y docente de Literatura".

En Comandante Andresito la siesta es quietud. El sol lacera la piel pese a que el calendario indica que aún es invierno. En las calles sólo se ven algunos camiones que regresan de los yerbatales. Y los chicos que, con paso cansino van a la escuela, en su lucha para no repetir la historia de Sandra y su familia.